La Organización Mundial de la Salud (OMS) renueva periódicamente su informe en el que publica las ciudades del mundo con la mejor calidad de su aire y, como no, también de España. Reconocimiento que no solo enorgullece a sus habitantes, sino que también lo convierte en la atracción turística idónea de quiénes van buscando un destino saludable para vivir o, simplemente, disfrutar.

En nuestro país, el gran afortunado en ostentar el título de la ciudad con mejor calidad de aire es Las Palmas de Gran Canaria. Situándose mucho más cerca de la costa africana que de la Península Ibérica (a más de 1000 kilómetros), goza de una situación estratégica que le confiere un clima privilegiado para evitar partículas contaminantes en el ambiente.

Sus temperaturas suaves durante todo el año y las constantes ráfagas de viento que favorece la dispersión de los componentes contaminantes. Estos, conocidos como los alisios, soplan desde el noreste arrastrando consigo aire limpio del océano Atlántico, consigue mantener la contaminación a muy bajos niveles.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) renueva periódicamente su informe en el que publica las ciudades del mundo con la mejor calidad de su aire y, como no, también de España. Reconocimiento que no solo enorgullece a sus habitantes, sino que también lo convierte en la atracción turística idónea de quiénes van buscando un destino saludable para vivir o, simplemente, disfrutar.

En nuestro país, el gran afortunado en ostentar el título de la ciudad con mejor calidad de aire es Las Palmas de Gran Canaria. Situándose mucho más cerca de la costa africana que de la Península Ibérica (a más de 1000 kilómetros), goza de una situación estratégica que le confiere un clima privilegiado para evitar partículas contaminantes en el ambiente.

Sus temperaturas suaves durante todo el año y las constantes ráfagas de viento que favorece la dispersión de los componentes contaminantes. Estos, conocidos como los alisios, soplan desde el noreste arrastrando consigo aire limpio del océano Atlántico, consigue mantener la contaminación a muy bajos niveles.

Además, a diferencia de otras ciudades españolas con altos niveles de contaminación industrial, Las Palmas de Gran Canaria basa su economía, principalmente, en el turismo y los servicios, por lo que la ausencia de grandes industrias contaminantes contribuye significativamente a mantener la calidad del aire.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) renueva periódicamente su informe en el que publica las ciudades del mundo con la mejor calidad de su aire y, como no, también de España. Reconocimiento que no solo enorgullece a sus habitantes, sino que también lo convierte en la atracción turística idónea de quiénes van buscando un destino saludable para vivir o, simplemente, disfrutar.

En nuestro país, el gran afortunado en ostentar el título de la ciudad con mejor calidad de aire es Las Palmas de Gran Canaria. Situándose mucho más cerca de la costa africana que de la Península Ibérica (a más de 1000 kilómetros), goza de una situación estratégica que le confiere un clima privilegiado para evitar partículas contaminantes en el ambiente.

Sus temperaturas suaves durante todo el año y las constantes ráfagas de viento que favorece la dispersión de los componentes contaminantes. Estos, conocidos como los alisios, soplan desde el noreste arrastrando consigo aire limpio del océano Atlántico, consigue mantener la contaminación a muy bajos niveles.

Además, a diferencia de otras ciudades españolas con altos niveles de contaminación industrial, Las Palmas de Gran Canaria basa su economía, principalmente, en el turismo y los servicios, por lo que la ausencia de grandes industrias contaminantes contribuye significativamente a mantener la calidad del aire.

No solo eso. La capital de la isla de Gran Canaria cuenta con políticas locales que fomentan el desarrollo sostenible y la protección del medio ambiente, medidas que se traducen en un entorno más limpio y saludable que la propia organización internacional ha sabido reconocer.

El mejor aire de ciudad para respirar

El informe publicado recientemente por la OMS sobre la calidad del aire reconoce que Las Palmas de Gran Canaria es la ciudad con el aire más limpio de España. Una valoración que se estima de una muestra recogida entre 1600 urbes de 91 países alrededor del mundo.

El estudio mide sobre todo las partículas contaminantes (PM) de 2,5 micras de diámetro, las más perjudiciales para la salud humana, procedentes especialmente de las combustiones de los medios de transportes terrestres, aéreos y marítimos.

En este aspecto, la OMS indica que solo el 12% de la población mundial residente en ciudades respira aire no contaminado y que casi la mitad convive con una polución mucho mayor que los niveles recomendados (2,5 veces más).

Las Palmas de Gran Canaria, además de ser la ciudad española con el aire más limpio, puede presumir también de ser una de las urbes con mejor clima del mundo, como la ha catalogado la revista estadounidense especializada en meteorología ‘Weatherwise’, entre las diez ciudades más envidiables de clima de todo el planeta, tan solo precedida de Viña del Mar (Chile).

Respirar el aire de esta ciudad resulta todo un privilegio. Sumado al rico patrimonio histórico y cultural de la ciudad, viajar hasta ella se convierte en un lujo para los sentidos, más allá de la excelencia medioambiental que en este aspecto la ciudad ofrece a sus vecinos y turistas.

Un logro que no es suficiente

Recientemente, salía publicado el informe de La calidad del aire en el Estado español durante 2023. Este recogía los datos de las estaciones de control de la contaminación de cada comunidad autónoma del país.

En el caso de las Islas Canarias, sigue preocupando determinados puntos de contaminación, procedentes especialmente de las centrales termoeléctricas de fueloil, el tráfico marítimo procedente de los principales puertos, el tránsito aeroportuario y el motorizado de las principales aéreas metropolitanas.

Otro de los grandes problemas contaminantes que tiene Canarias es su proximidad con el continente africano y los frecuentes episodios de intrusión de polvo sahariano que las islas sufren constantemente.

Como consecuencia de todos estos componentes, la población canaria continuó respirando en 2023 un aire perjudicial, según las recomendaciones de la OMS. Según este informe anual y basándose en los nuevos límites legales aprobados por el Parlamento Europeo para 2030, el 63% de canarios (1,4 millones de personas) habitan en zonas donde se superan los límites legales vigentes en la actualidad de partículas PM.

Cada año mueren en el mundo más de siete millones de personas provocados por los efectos del cambio climático, haciendo que esta razón sea el principal riesgo medioambiental para la salud del hombre.

Fuente: https://www.elespanol.com/